La Federación Navarra de Fútbol continúa con su labor por garantizar e impulsar en los partidos de las diferentes categorías de los Juegos Deportivos de Navarra valores como el respeto y la deportividad; y por prevenir la violencia o el maltrato, erradicando cualquier actitud o comportamiento violento. Esta labor la realizan cada fin de semana personas anónimas y voluntarias que se recorren los diferentes campos de fútbol con el fin de supervisar las competiciones y velar por el buen desarrollo de las mismas.
Son los DELEGADOS DE VALORES. Se trata de una figura educativa y disuasoria de actos violentos, que promocionará y salvaguardará el buen trato, las buenas prácticas, los valores y la dimensión educativa del deporte. La labor de los/las delegados de valores es de colaboración con el cuerpo arbitral. Es decir, su tarea también pasa por detectar aquellos conflictos que no sean competencia de los árbitros, pero que se produzcan en torno a la propia competición, reflexionando con las personas implicadas, escuchándoles, pero también marcándoles los límites de la deportividad y el respeto de los valores del deporte.
Asimismo, colaboran con los responsables deportivos de ambos equipos y con el público en general. Esta colaboración pretende que todas las personas integrantes de los clubes presentes en el terreno de juego, así como la afición, se impliquen en una convivencia pacífica.
Los/las delegados de valores dependen de la federación y sus funciones se enmarcan dentro del Plan de Valores desarrollado por el Instituto navarro de Deporte y juventud en colaboración con las federaciones y entidades deportivas.
Son personas discretas, reconocibles por su indumentaria; peto verde y acreditación. Las imágenes de este reportaje se tomaron en el partido entre Liceo Monjardín y Cantolagua.